Notable

Pariente del correcaminos raramente visto

Para los observadores de aves con una "lista de vida" de sueños de avistamiento hechos realidad, el cuco terrestre de ventilación rojiza comúnmente decepcionará. Los informes de vislumbres fugaces siempre han sido raros, incluso entre los observadores de aves más fervientes que están de acuerdo en que esta es una de las especies más difíciles de detectar.

Para apreciar el revuelo que causaron nada menos que siete de estas misteriosas criaturas en un sitio de conservación de Costa Rica a principios de febrero de 2021, lea el artículo de Howler Conozca a la última celebridad de aves de Costa Rica

Más allá de su renombre como santo grial, el cuco terrestre de ventilación rojiza (neomorfo Geoffroy) es un pariente del sur del famoso correcaminos de América del Norte. Las fuentes de observación de aves suelen describir al gran habitante del suelo como inconfundible si se ve bien, pero muy difícil de encontrar. Busque un ave robusta con una cola larga, una cresta raída y un pico robusto de color amarillento pálido. El color marrón general se compensa con una banda negra en el pecho y un brillo metálico verde y morado en las alas y la cola. Las aves adultas miden alrededor de 48 centímetros (19 pulgadas) de altura y pesan alrededor de 350 gramos (12 onzas).

Los hábitats distribuidos en parches de los cucos terrestres de ventilación rojiza se extienden desde Honduras hasta Brasil, en bosques de tierras bajas y ocasionalmente en estribaciones hasta alrededor de 1,600 metros. Se han identificado tres poblaciones regionales distintas de la siguiente manera: desde el sur de Nicaragua, a través de Costa Rica y Panamá, hasta el noroeste de Colombia; el este de Ecuador y Perú, y el norte de Bolivia y Brasil; y el Bosque Atlántico de Brasil.

Normalmente se encuentran solas o en parejas siguiendo enjambres de hormigas armadas en el suelo del bosque, alimentándose de insectos grandes, escorpiones, ciempiés, arañas, ranas pequeñas y lagartijas que las hormigas han perturbado.  

La investigación ha revelado que los cucos terrestres del género neomorfo producen un chasquido con sus picos similar al sonido que hacen los pecaríes (cerdos salvajes) cuando se alertan entre sí del peligro.

¡Consulte la página 58 en pantalla completa!

NUEVO: ¡escuche la historia!

publicar un comentario

62 - 55 =