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La práctica del Yoga es mucho más que hacer bonitas formas con tu cuerpo: es un sistema holístico que abarca la mente, el cuerpo y el espíritu, ofreciendo un viaje de autodescubrimiento y transformación que va mucho más allá de la apariencia externa de flexibilidad y fortaleza. Existe una práctica de Yoga adecuada para tu cuerpo; tómate el tiempo para encontrar un instructor que comprenda tus necesidades. El yoga es para todos, sin importar su género, origen, capacidad física o situación económica.

Cuando llegues a practicar en este hermoso país, te encontrarás tan conectado con la Madre Tierra que te darás cuenta que no hay separación entre tú y ella, no hay separación entre tú y los seres que te rodean, ya que nuestra esencia es todo. lo mismo. Costa Rica es famosa por su impresionante belleza natural y ofrece más que un simple destino de viaje: es un santuario para quienes buscan explorar el poder transformador del yoga. 

El yoga cultiva la atención plena y enseña a las personas a estar presentes en el momento, a respirar conscientemente y a observar sus pensamientos y emociones sin juzgar. Proporciona herramientas para gestionar el estrés, la ansiedad y los desafíos de la vida moderna, lo que en última instancia conduce a una sensación de calma y equilibrio interior.

Te invito, mientras lees este artículo, a sentarte en una silla cómoda con las manos apoyadas en el regazo. Inhale larga y profundamente por la nariz y exhale (más tiempo de lo habitual) por la boca. Repita un par de veces e imagine que cada exhalación que realiza en este espacio a través de la boca invita a la tensión a abandonar su cuerpo. Deja que la exhalación tenga un sonido, como un suspiro, cada vez que salga de tu boca. Repita varias veces hasta que sienta que su sistema nervioso se relaja.

Ahora estamos listos para esta técnica de respiración:

Inhala y deja que el aliento llegue hasta tu bajo vientre, casi como si tus pulmones estuvieran ubicados en esta zona y luego llena todo tu diafragma, haz una breve pausa, luego exhala por la boca.

Si este proceso te resulta fácil, ahora vamos a hacer una pausa muy breve entre exhalar e inhalar: inhala por la nariz llenando todo el diafragma, haz una pausa, exhala por la nariz y haz una breve pausa antes de volver a inhalar.

Esta técnica de respiración se practica en todo el mundo para aliviar la ansiedad y reducir el estrés y comúnmente se llama respiración de caja o respiración cuadrada. A medida que empieces a practicar esta técnica, encontrarás que el tiempo de espera, especialmente después de la exhalación, es un poco incómodo. Con unos minutos de práctica al día, empezarás a sentirte cómodo en este vacío y, con el tiempo, lo sentirás casi natural.  

Explore el tiempo entre inhalar y exhalar y entre exhalar e inhalar, y asegúrese de no estar nunca desesperado por respirar antes de la próxima inhalación; sienta como si este fuera el ritmo natural de su respiración.

Antes de salir de este espacio y continuar con tu día, ofrece gratitud por tu respiración y tu maravilloso cuerpo por permitirte ser un recipiente de amor, creatividad, abundancia y todas las cosas que son únicas para ti.

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Anabel Miranda

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