Proteger tanto su propiedad como el medio ambiente de los estragos de la temporada de tormentas presenta algunos desafíos y soluciones especiales. Un artículo en May-Jun Howler discutió varias formas de minimizar el impacto ambiental al construir en Costa Rica. Las consideraciones ecológicas cobran mayor importancia cuando se trata de los contrastes extremos en los patrones de lluvia de la región de Guanacaste. Durante la mitad del año, podemos esperar poca o ninguna lluvia, lo que tendrá un impacto mínimo en nuestras propiedades. La otra mitad del año normalmente trae eventos aleatorios de tormentas eléctricas, aguaceros torrenciales e inundaciones. Una sola tormenta puede causar daños masivos en las carreteras, erosión de las laderas e inundaciones en las zonas bajas, a menos que se tomen ciertas medidas preventivas.

Contrariamente a la creencia popular de tratar de eliminar el agua de nuestras propiedades lo más rápido posible, el método de control opuesto (disminuir el flujo de agua en movimiento) suele ser más efectivo. Naturalmente, la mejor manera de disminuir el flujo de escorrentía de agua de lluvia es con el uso de pasto vetiver o bambú.

El colaborador de Howler Tom Peifer ha escrito anteriormente sobre el vetiver, habiendo sido influyente en el uso de la hierba milagrosa en Guanacaste para el control de la erosión. El principio es simple: el vetiver es una hierba tenaz y resistente a la sequía con un sistema de raíces masivo. Cuando se planta en hileras en la ladera de una colina en terrazas, la hierba no solo mantiene la tierra unida con sus raíces, sino que reduce el flujo de agua que se escurre colina abajo con su follaje fuerte y robusto.
De la misma manera, el pasto vetiver ofrece una doble solución natural a los problemas de erosión. En primer lugar, al permitir que el agua penetre en el suelo, es una forma de reponer nuestra capa freática para que el agua esté disponible en nuestra cuenca hidrográfica y entornos domésticos. En segundo lugar, puede ayudar a atrapar los materiales sueltos incorporados con el agua de escorrentía, evitando así que el lodo, la suciedad y los escombros se acumulen en nuestros caminos, arroyos y ríos.

El bambú ofrece otra excelente manera de apuntalar las laderas contra la erosión y, mejor aún, de controlar el flujo de agua en los lechos de los arroyos. También actúa como un dique natural para frenar el flujo de agua y al mismo tiempo recoger el material que se arrastra con las lluvias. El bambú no solo es hermoso, sino también resistente a la sequía. Los postes hechos de la planta de bambú madura se pueden usar para muchos proyectos de bricolaje en el hogar.

Tanto el pasto vetiver como el bambú son formas baratas y fáciles de mitigar la erosión y, al mismo tiempo, ayudan a optimizar los niveles de las cuencas hidrográficas. Si hay algún inconveniente, es que el propietario de una empresa constructora no tenderá a ganar mucho dinero con tales proyectos de construcción. Sin duda, la alternativa preferida por la mayoría de las empresas de ingeniería sería construir un enorme muro de contención. Sin embargo, el único momento en que los muros de contención son realmente necesarios es cuando la inclinación de una pendiente es superior a 45 grados. En ese caso, se le recomienda considerar un muro en lugar de fortalecer el suelo para evitar la erosión.

Los muros de contención tienen el doble propósito de evitar la erosión de una ladera y, al mismo tiempo, soportar las cargas pesadas de la tierra y la construcción de arriba. Los diferentes tipos de muros de contención incluyen voladizos, gravedad, suelo clavado, suelo reforzado, pilotes anclados y perforados. El tipo de muro a usar depende de factores tales como la capacidad de carga, el tipo de suelo, la profundidad del lecho rocoso para los cimientos y el grado de la ladera que se va a conservar.

Prefiero el uso de muros escalonados, que dividen un solo muro en varios muros de diferentes alturas y distancias. Aunque tienden a ser más caras que una sola pared, las paredes en terraza se ven mucho mejor y permiten plantaciones en el medio. También comparten un atributo ambiental con el vetiver y el bambú al ayudar con la absorción de agua en la tierra.

Como la causa principal de la erosión, el agua de lluvia también puede causar daños al salir de su techo si no se controla. O bien, puede reutilizarse si invierte en un sistema de recolección y almacenamiento de agua para su hogar. Con tanques de almacenamiento de gran capacidad, puede hacer que el agua recolectada durante la estación lluviosa dure meses hasta la estación seca. Si no es posible invertir en un sistema de este tipo, la mejor opción es enviar el agua de lluvia lejos de su hogar a un área donde la erosión de las laderas sea mínima.